La caída del Boeing 787 pudo deberse a un golpe de la azafata en la cabina

Un inocente error de una integrante de la tripulación fue lo que probablemente causó la caída en picada del Boeing 787 Dreamliner y que hirió a decenas de pasajeros en un vuelo de LATAM esta semana. Esto, de acuerdo con un nuevo informe.

El Wall Street Journal dice que la evidencia preliminar apunta a un incidente en la cabina. Al parecer, cuando una asistente de vuelo estaba sirviendo la comida, accidentalmente golpeó un interruptor en el asiento del piloto, lo que habría causado la caída del avión.

El interruptor tiene una cubierta que busca evitar que sucedan este tipo de incidentes mientras el piloto está sentado, de acuerdo con el informe del WSJ, pero es evidente que algo salió mal, o se trata de un tremendo error del operador.

Como informamos, la aerolínea chilena estaba volando de Australia a Nueva Zelanda el lunes cuando sufrió una fuerte caída, que arrojó a varios pasajeros hacia el techo del avión. El piloto fue capaz de recuperar el control y todos aterrizaron en Auckland, pero 50 personas fueron tratadas por diversas lesiones que no ponían en peligro su vida.

Las autoridades sacaron las cajas negras del avión el martes para comenzar su investigación.

Lo realmente interesante es que, según los pasajeros, el piloto dijo que el panel de instrumentos de la cabina se había ido a negro repentinamente durante unos momentos mientras intentaba explicar qué había pasado.